1.- Sector porcino en cifras
El sector porcino mantiene un año más su liderazgo dentro de la ganadería en España, con un nivel de facturación que ronda los 6.000 millones de euros y que lo posiciona como segundo productor europeo por detrás de Alemania. Dentro de la economía agraria española, el sector porcino representa más del 38% de la producción final ganadera y el 14% de la producción final agraria, siendo solamente superado por el sector de frutas y hortalizas.
Actualmente, a comienzos del 2016, la situación del ganadero es que está vendiendo sus animales por debajo del precio de coste, lo que está arrojando unas pérdidas sustanciales de entorno a 15 – 20 € por cerdo sacrificado. El ganadero entró en esta situación de pérdidas a finales de octubre, haciéndose más acuciante en la segunda quincena de noviembre, en diciembre y enero, poniendo en riesgo el balance de resultados del pasado año, donde la media de precio y los costes han estado muy parejos: la media del precio de Mercolleida (como lonja de referencia a nivel nacional) se ha situado en los 1,131 €/kg de PV. Según SIP Consultors (empresa de referencia a nivel de costes de producción) el coste de producción medio del primer semestre del 2015, y que se puede extrapolar a la situación total del año, es de 1,098 €/kg PV, lo que arrojaría un beneficio neto de 0,033 €/kg PV, sin considerar descuentos, bajo rendimiento, los famosos -2,5 kg… Si se tiene en cuenta todo lo que al ganadero se le descuenta por sus animales, la media SIP para el primer semestre del 2015 ha sido de 5,3 céntimos kg PV, convirtiendo así el 2015 en un año de pérdidas.
Si bien es cierto que el 2015 ha arrojado pérdidas desde el punto de vista de la media del sector, es importante señalar que la heterogeneidad del sector porcino español también se pone de manifiesto en una variedad de costes de producción y de precio percibido por la venta de los animales, de tal forma que el margen, para el primer semestre del 2015, se ha situado entre los -6 y los +5 céntimos por kg PV. Es decir, las diferencias en los costes de producción, eficiencia y una buena gestión de cargas y pesos a sacrificio, han determinado la rentabilidad o pérdidas de la explotación porcina española.
La situación del mercado en los dos últimos años está marcando una tendencia sumamente preocupante. En el 2014, la lonja de Mercolleida cayó un 7,5%, pasando de los 1,378 €/kg PV de media en 2013, a los 1,273 de 2014. Y la caída de 2015 fue aun mayor, de un 11,14% llegando a los 1,131 €/kg PV. Esta situación vivída por el cerdo de sacrificio es incluso más drámatica en el caso del lechón de 20 kg, cuyo vendedor ha perdido una media de 20 € por unidad en el 2015, experimentando, de igual forma que el gordo, una paulatina e incesante caída de precios desde el 2013, en que consiguió sus máximos. En la actualidad, el lechón de 20 kg está viendo reflotar su precio, aun algo lejos de su equilibrio de costes, pero esta tendencia alcista denota la activación de mercado, los signos positivos del mismo más alla del verano y un alivio para el productor de lechones con una liquidez muy mermada.
Por tanto, la primera conclusión parcial sería: la situación del mercado arroja pérdidas al productor, si bien es cierto que dependiendo de la estructura, costes y posibilidad de acceso a mercados, hace posible que dentro de la nebulosa de balances de resultados de las granjas porcinas españolas, se esté en un diferencial de 11 céntimos, lo que puede hacer que el productor esté en pérdidas o en ganancias.
2.- ¿Por qué se ha llegado a esta situación?
A toro pasado es fácil determinar cuáles han sido los factores que han generado esta caída en los precios de Mercolleida, y que además, casi todos, son bien conocidos por los productores profesionales.
1.- El autoabastecimiento de porcino en España en el 2014 fue del 157,7%, por lo que el 43% de todo lo que se produce debe salir de nuestras fronteras, bien sea para la UE o para terceros países. La presión de venta ha hecho y hace que para las industrias sea una necesidad estructural buscar compradores más allá de la geografía nacional compitiendo fuertemente en el libre mercado.
2.- Estructura de producción. En los últimos 15 años se ha vivido una paulatina, y a veces dramática, reducción en el número de explotaciones de ganado porcino, ligada al incremento de tamaño de las existentes, lo que se ha interpretado como un paso al frente en el dimensionamiento individual y concentración de la producción. El 2014 fue el primer año en el que, además de continuar con esta tendencia de concentración, se ha aumentado el número de explotaciones de porcino, es decir, se han abierto más de la que se han cerrado. Esto ha sido especialmente significativo en las granjas grandes (de 360 a 864 UGM) cuyo incremento ha sido del 21,8%.
3.- Censo. Tras la primera crisis de las materias primas del 2007/08 y la incertidumbre de la aplicación de la normativa de bienestar, donde el número de madres disminuía manteniendo la producción de cerdos sacrificados, en los dos últimos años el sector ha crecido en su motor de producción: las reproductoras. Con este incremento se ha pasado de los 2,252 millones a 2,4 millones de mayo de 2015, lo que ha supuesto un incremento del 6,57% que, por supuesto, incrementará en una cifra superior los animales producidos.
4.- Producción. Incremento importante en la oferta de cerdos vivos. En el 2014 aumentó un 4,98% respecto a 2013, llegando a superar los 43,5 millones de cabezas sacrificadas. En 2015, los datos provisionales hasta octubre arrojan un incremento de sacrificios de casi 2,3 millones de cabezas, más lo que se puede aventurar, el 2015 se cerró por encima de los 45 millones de cerdos producidos en España.
5.- Desajuste entre la oferta y la demanda. Es decir, retrasos en sacrificios sobre el peso objetivo. Según los datos de Mercolleida, el peso medio de la canal en los años 2012-2014 fue de 81,66 kg, aumentándose en 2015 hasta los 83,27 kg por canal.
6.- Diferencia del despiece. Pese a que tanto la lonja del vivo, Mercolleida, como la lonja del despiece, Barcelona, han experimentado sendas caídas en los últimos 3 años, el diferencial ha sido siempre positivo para el matadero, y de una forma muy importante en 2014 donde el despiece no cayó tanto como el vivo, creando un incremento en los márgenes lo que motivó a aumentar la demanda.
7.- Productos del porcino: consumo y mercado. Pese a que el consumo de frescos está cambiando su tendencia bajista y ha comenzado a incrementarse (gracias en parte a la presión de marketing de los anuncios en televisión de INTERPORC), el precio de la carne está bajando, tal y como lo está haciendo el petróleo y las materias primas. En la exportación es donde el sector porcino español, y gracias al sector industrial, está manteniendo el tipo. Con unos incrementos constantes en el volumen de exportación que en 2014 fueron de un +5,33% para la UE y de un +33% para terceros países, y que además estos crecimientos se han mantenido en el 2015. Las cifras de octubre de Datacomex arrojaban un incremento de un 3% para la UE y de un 39% para terceros países. El problema: la pérdida de valor unitario de los productos comercializados, tanto en mercados exteriores como en el mercado interno. No ha ayudado nada la posición de los productores franceses antimercado libre, boicoteando los productos españoles, y el desafortunado informe de la IARC-OMS identificando el consumo de carnes rojas y productos transformados con la aparición de cáncer de colon.
8.- Resultados económicos previos. Esta situación de fuerte incremento de producción produce un aumento de la demanda, que ha generado una serie de ejercicios positivos para el ganadero. 2012, 2013 y 2014 fueron años positivos para el ganadero de porcino que venía de unos años 2011 y 2010 con resultados neutros y problemas graves en 2008 y 2009.
3.- ¿Qué opciones hay para mejorar el mercado?
La maquinaria de incremento de producción que se ha puesto en marcha en España está funcionando, con lo que a corto plazo la presión de la oferta se va a mantener hasta que se puedan realizar los ajustes estructurales necesarios. Esto es lento y depende de la situación individual de cada granja, por lo que, por ahora, solo queda mirar hacia el consumo y la exportación.
En lo que se refiere a la exportación, las esperanzas de mejora vienen dadas por la posibilidad de apertura del mercado mexicano a la carne cruda europea. Los informes de inspección realizados en Europa por las autoridades mexicanas parecen haber sido positivos, aunque la autorización se está retrasando más de lo deseado.
Rusia: doble embargo, político y sanitario. El objetivo con Rusia es renegociar la regionalización de la UE, obtener un nuevo certificado para la exportación y poder comercializar con aquellos productos no sometidos al embargo político, grasas, mantecas y despojos. Está en manos de las posibilidades de negociación de la Comisión Europea con Rusia.
China, el gran productor, importador. Su descenso en la producción podría atisbar un posible aumento en las importaciones, y después de que EEUU firmara el acuerdo de libre comercio transpacífico para contrarrestar la hegemonía de China en esos mercados, es fácil que China necesite abastecerse de porcino y mire más hacia la UE que hacia América. El problema de China es que su economía está pasando por unos momentos inciertos, lo que podría dificultar las compras en mercados exteriores.
4.- Propuestas de ANPROGAPOR
En conclusión, el 2016 va a ser un año difícil para el sector, pero la profesionalización del mismo hace que ni le asuste ni le desmotive esta situación, simplemente hay un cambio de escenario muy drástico en el que también hay que saber tomar las decisiones correctas (muchas veces duras) y minimizar daños a la espera de tiempos mejores. La eficiencia de producción, el ajuste oferta- demanda y el comercio exterior, van a ser las piezas claves del 2016. Las propuestas de ANPROGAPOR, más que encaminarse a subvenciones individuales, van dirigidas a la dinamización del sector, eliminar trabas y ataduras para que un sector líder, formado por ganaderos profesionales, encuentre lo antes posible la salida de esta crisis.
Cerdo Cebado: 1,565 €/kgPV (0,000)
Lechón 20 kg Lleida: 48,00 € (+1,00)
Cerda Desvieje: 0,730 €/KgPV (0,000)